Lugo, tras los pasos de la historia
Ubicada en el norte de España, Lugo es una de las ciudades más interesantes de la Península Ibérica desde el punto de vista arqueológico. Lugo es la capital de la provincia del mismo nombre, al nordeste de Galicia, y su muralla romana, una de las mejor conservadas del mundo, está considerada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Pero aunque su muralla sea sin duda su seña de identidad, son muchos los tesoros que podemos descubrir en esta ciudad y sus alrededores. Como ocurre con otras provincias gallegas, Lugo es una tierra de contrastes y de paisajes cambiantes, donde predomina el verde y las áreas montañosas, alejándonos por completo del paradigma del paisaje ibérico. Fruto de este contraste nos encontramos playas tan impresionantes como la de Las Catedrales, reconocida como una de las mejores playas de España. La arquitectura de las rocas moldeadas y horadadas por las olas construye un arenal que parece por momentos una gigantesca cueva, y en el que podemos caminar por el interior de rocas milenarias de gran altura que han sido perforadas por la fuerza del agua.
Una ruta milenaria entre las montañas
La zona del interior de Lugo alberga la Reserva de la Biosfera Terra do Miño, y por aquí pasan ríos, algunos de ellos calificados como “mágicos” por los romanos, como el Eo o el Osco, que se pierden entre las Reservas Naturales de Terra de Burón o de Os Ancares. El Camino Francés de Santiago, el más recorrido de las diversas rutas, atraviesa también esta provincia con paradas en diversos monasterios e iglesias románicas abandonadas que añaden un toque de misterio a la caminata y que revelan de forma inconfundible la entrada en Galicia. Ya sea como caminante o como visitante, no se puede dejar Lugo sin degustar su gastronomía. Mariscos, pulpo y pimientos harán las delicias de los paladares más exquisitos.