Santa Susanna, belleza natural y cultura
Impregnada de encantos naturales y una rica herencia histórica y cultural, Santa Susanna es una de esas pequeñas ciudades ideales para turistas que quieran descubrir un destino poco conocido dentro del turismo cultural. Sus orígenes se remontan al siglo XII, y de esa época se han mantenido y conservado de manera extraordinaria monumentos de interés como sus capillas, y sus torres de vigía. Todo ello rodeado de parajes verdes y montañas que, desde sus alturas, regalan unas de las mejores vistas que se pueden tener dentro de la comarca del Maresme catalán.
Las torres de vigía de Santa Susanna
Las imponentes torres de vigía son sin duda la seña de identidad más relevante de Santa Susanna, y la más famosa y visitada es la de la masía Can Ratés, una impresionante estructura defensiva de tiempos medievales.
Por su parte, la de Can Bonet d’Avail puede que sea la más atractiva por su apariencia externa, recientemente renovada; fue construida en el siglo XV y tanto su exterior como su interior son de indiscutible atractivo.
La Iglesia Parroquial de Santa Susanna
Una de las visitas artísticas y culturales más interesantes en Santa Susanna es la que se puede hacer en la Iglesia Parroquial, cuyas paredes blancas encierran una fascinante colección de arte religioso, entre las que destacan la pintura del patrón local ascendiendo a los cielos.
Comer en Santa Susanna
Para comer platos típicos españoles justo frente al mar podemos acudir al restaurante Ship Inn, donde las paellas y fideuás tienen fama entre locales y turistas, además de muchos otros platos relacionados con la gastronomía local y los productos del mar (Calle del Pines, s/n 08378, Santa Susanna, España).